Leda y el cisne
Vlady plasma en su obra una iconografía muy personal y bastante difícil de descifrar, pero también se “apropia” de las mitologías mesoamericana (Quetzalcóatl, Cuauhtémoc…), judeo-cristiana (Judith, Holofernes, Cristo, San Pablo, San Jerónimo…) y, sobre todo, greco-latina (Prometeo, Edipo, Narciso Ícaro, Sisifo, Leda, Perseo, Medusa, Jano…) transformándolos y resignificándolos. Generalmente, trabaja las imágenes previamente en sus cuadernos y luego las vierte en grabados, bocetos, acuarelas, óleos y en los murales de la Biblioteca Lerdo de Tejada así como en los del Palacio Nacional de la Cultura de Managua, Nicaragua, que realizó en 1986 por invitación del gobierno sandinista.
En el caso de Leda, uno de los mitos más recreados por la pintura. Vlady pinta la imagen erótica de Leda y el cisne durante toda su vida, así se puede constatar en sus cuadernos y en algunos grabados.